vendredi 2 mars 2018

La madurez


Cuando la fruta exprime toda su dulzura o toda su amargura. Pero la madurez del hombre no se puede resumir a la de una fruta. En su cúspide la pirámide llega a su grado máximo. Así es y así lo siente el hombre que sin hijo puede sentirse padre por el simple hecho de la edad y amante de la tierra toda que puede haber aborrecida en su tierna edad. Desde allí su vista se ha ampliado y aunque pueda tener vértigo se maravilla. Como diseminadas en un campo de batalla parecían las piedras que desde la base hasta la cumbre participaron a su edificación. Ahora sabe que nada pasó en vano. Solo ahora todas sus experiencas experimenta. El bruto se afino.

Un amigo de la infancia que conmigo ha envejecido siempre me decía: ¿ Díme tú si le encuentras algo bueno en eso de hacerse viejo ? Y a cada argumento que le podía exponer encontraba su fácil refutación. Este amigo de la infancia, además gran excursionista, también solía decir que no podía ver un monte sin sentir la necesidad de subir hasta la cumbre. Pues, amigo de la infancia, allí estás : que con la vejez se llega a la madurez.

Aucun commentaire:

Enregistrer un commentaire